
En un mundo donde la innovación y el impacto social son herramientas clave para abordar desafíos globales, surge la necesidad de estructurar de manera efectiva el impacto de las iniciativas.
La Tesis de Impacto y la Teoría del Cambio son dos enfoques que permiten a las organizaciones definir, medir y comunicar el cambio que buscan generar en la sociedad.
Antes de entrar en los enfoques y cuestiones clave, quiero dar las gracias a Fernando García, de la consultora Kamein por invitarme a elaborar este artículo de reflexión, y a José Félix Gonzalo, experto en Gestión Avanzada, Sostenibilidad, Buen Gobierno, Compliance, Ética Empresarial e Impacto Social, que son aspectos clave para poder responder con criterio a las preguntas formuladas a continuación.
Para estructurar una Tesis de Impacto sólida, es fundamental responder a tres preguntas esenciales:
Cada empresa o iniciativa nace para resolver una problemática específica. Identificar de manera clara y objetiva cuál es la necesidad social o ambiental que se busca atender es el primer paso hacia un impacto significativo. Por ejemplo, en el sector de la biotecnología, una organización puede identificar la falta de acceso a tratamientos personalizados para enfermedades raras.
La solución propuesta debe estar alineada con la misión de la organización y debe estar basada en evidencia. Puede tratarse del desarrollo de un producto, un servicio o una combinación de ambos. En el ejemplo anterior, la solución podría ser la creación de una plataforma de análisis genético accesible y eficiente.
El impacto esperado se refiere a los cambios que se busca generar en la sociedad a corto, mediano y largo plazo. Una organización debe definir indicadores que permitan evaluar si su solución realmente está logrando los efectos deseados. Siguiendo el mismo ejemplo, el impacto esperado podría ser la mejora en la calidad de vida de pacientes con enfermedades raras mediante tratamientos personalizados basados en análisis genéticos.
Fuente: https://www.tedic.org/teoria-del-cambio/
La Teoría del Cambio es un marco estratégico que permite planificar y evaluar el impacto de una organización mediante la identificación de los pasos necesarios para alcanzar su objetivo final. Se basa en cinco elementos clave:
Los recursos incluyen todos los insumos necesarios para desarrollar la solución. Estos pueden ser financieros (inversión, subvenciones), humanos (talento especializado, equipos de trabajo) y de otro tipo (tecnología, infraestructura, alianzas estratégicas).
Las actividades son las acciones específicas que la organización lleva a cabo para convertir los recursos en productos o servicios. Por ejemplo, en una empresa de biotecnología, las actividades podrían incluir la investigación y desarrollo de nuevos tratamientos, pruebas clínicas y la colaboración con centros médicos.
Son los resultados tangibles de las actividades realizadas. Siguiendo con el ejemplo, un producto podría ser una prueba genética innovadora o una nueva terapia personalizada.
Se refiere al uso de los productos por parte de la población beneficiaria. En este caso, sería el número de pacientes que acceden a las pruebas genéticas y reciben recomendaciones de tratamiento.
Este es el impacto a largo plazo que se espera lograr. En el caso de la empresa biotecnológica, el resultado final podría ser una mejora significativa en la tasa de supervivencia y calidad de vida de los pacientes con enfermedades raras.
Fuente: https://viewnext.usal.es/blog/8-pasos-de-john-kotter
La combinación de una Tesis de Impacto bien definida y una Teoría del Cambio estructurada permite a las organizaciones no solo visualizar su impacto de manera clara, sino también comunicarlo de manera efectiva a inversores, socios y beneficiarios. Alinear recursos, actividades y objetivos con un propósito claro es el camino hacia un cambio significativo y sostenible.
Como indiqué al comienzo del artículo, esta información es una reflexión originada por la invitación de Fernando y las cuestiones planteadas por José Félix a un informático que desea ayudar a mejorar procesos, con impacto social, y con criterio. Gracias a Fernando, José Félix y a todas las personas que quieren luchar por un mundo mejor.
Iñaki Lázaro, secretario de la Asociacion Ahórratelo